但是,馬爾克斯為讀者打開了另一扇窗戶:即使在世人面前孩子一無所值,比輕如鴻毛更低賤,但是在母親的心中,孩子永遠是孩子,是母親永遠的愛憐。無邊無際的母愛,無所畏懼的母愛,超越了道德,讓讀者感動。
La mujer dejó de comer.
那位婦女停下來不吃了。
—Ponte los zapatos—dijo.
“把鞋穿上!”她對小女孩說。
La niña miró hacia el exterior. No vió nada más que la llanura desierta por donde el tren empezaba a correr de nuevo, pero metió en la bolsa el último pedazo de galleta y se puso rápidamente los zapatos. La mujer le dió la peineta.
—Péinate —dijo.
小姑娘向窗外張望了一下。映入她眼簾的還是那片荒涼的曠野。從這里起,火車又開始加快速度。她把剩下的餅干塞進袋子里,連忙穿上鞋。媽媽遞給她一把梳子。
“梳梳頭!”媽媽說。